Recuerdos de Claromeco...
recuerdos de claromeco
Y la calesita... tengo 30 años y me abuela se perdìa horas conmigo allì, los alfajores de Juan Gaviota, los cangrejos que no dejabamos en paz en el arroyo, las visitas al caracolero, robandole algun ^pesquero^ como se le decìa a los chasis con motor de Ford A al padre de alguno. las eternas guerras de piñas en el Vivero con mis amigos,
Si alguno veìa Verano Azul les juro que ellos la pasaban mal al lado de mis amigos y yo en Claromeco, gracias por ayudarme a revivir por un momento todo eso, salute...
Si alguno veìa Verano Azul les juro que ellos la pasaban mal al lado de mis amigos y yo en Claromeco, gracias por ayudarme a revivir por un momento todo eso, salute...
- Gustavo
- Suzukero Extremo
- Mensajes: 6589
- Registrado: 13 Dic 2004 18:33
- Ubicación: Tres Arroyos y Claromecó
Realmente los que hemos tenido la oportunidad de criarnos muy cerca de
la villa, fuimos muy afortunados.
El mismo año 1954 que naci, mis viejos me hicieron conocer el mar.
Todos los veranos, nos juntabamos con todos los primos chaqueños,
porteños, y realmente haciamos unas andanzas barbaras, rodeados de
pueblerinos de alta honestidad.
Nuestros padres nos dejaban andar por todo Claro, sin tener que
preocuparse por nuestra seguridad.
Ya cuando terminabamos las clases, nos instalabamos alli, hasta que en
marzo comenzaban otra vez.
Mis padres tenian una casa frente al mar, el del medio de los famosos 9
chalets construidos en 1921.
No habia costanera, o sea que de la casa por arena al mar.
Nunca se cerraba con llave ninguna puerta.
Durante todo el verano, la casa quedaba abierta.
Nadie tocaba nada, toda la gente era honesta.
Dejabamos la sombrilla y sillas en la playa durante dias.
Los vehiculos, quedaban todos con las llaves puestas.
Esa casa la vendieron en 1972, y nunca la pudieron cobrar.
La perdieron, pues fueron estafados.
Cuando me case, compre una casilla rodante, y con ella en el camping,
pasamos varios veraneos, hasta que compre un rancho precario en la 23.
Nuestros hijos amaron esa casita.
Un dia paceando por la costanera, hace unos 18 años, Vero, leyo que se
vendia una imposible casa, insistio que fueramos a verla, se me dieron
unos negocios y la compre, actualmente es nuestro refugio de los fines
de semana de todo el año.
Pensamos, alguna vez, poder ir a vivir permanentemente a Claro.
Quizas en unos años podamos, pero por ahora tenemos que trabajar
para poder mantener el circo.
A Vero la llevamos a la semana de nacer, en pleno invierno.
A Ale tambien a la seman de nacer, en primavera.
Todos los recuerdos de alli son hermosos.
Pasamos unos veraneos de 1ª, y tambien se la dimos a nuestros hijos.
la villa, fuimos muy afortunados.
El mismo año 1954 que naci, mis viejos me hicieron conocer el mar.
Todos los veranos, nos juntabamos con todos los primos chaqueños,
porteños, y realmente haciamos unas andanzas barbaras, rodeados de
pueblerinos de alta honestidad.
Nuestros padres nos dejaban andar por todo Claro, sin tener que
preocuparse por nuestra seguridad.
Ya cuando terminabamos las clases, nos instalabamos alli, hasta que en
marzo comenzaban otra vez.
Mis padres tenian una casa frente al mar, el del medio de los famosos 9
chalets construidos en 1921.
No habia costanera, o sea que de la casa por arena al mar.
Nunca se cerraba con llave ninguna puerta.
Durante todo el verano, la casa quedaba abierta.
Nadie tocaba nada, toda la gente era honesta.
Dejabamos la sombrilla y sillas en la playa durante dias.
Los vehiculos, quedaban todos con las llaves puestas.
Esa casa la vendieron en 1972, y nunca la pudieron cobrar.
La perdieron, pues fueron estafados.
Cuando me case, compre una casilla rodante, y con ella en el camping,
pasamos varios veraneos, hasta que compre un rancho precario en la 23.
Nuestros hijos amaron esa casita.
Un dia paceando por la costanera, hace unos 18 años, Vero, leyo que se
vendia una imposible casa, insistio que fueramos a verla, se me dieron
unos negocios y la compre, actualmente es nuestro refugio de los fines
de semana de todo el año.
Pensamos, alguna vez, poder ir a vivir permanentemente a Claro.
Quizas en unos años podamos, pero por ahora tenemos que trabajar
para poder mantener el circo.
A Vero la llevamos a la semana de nacer, en pleno invierno.
A Ale tambien a la seman de nacer, en primavera.
Todos los recuerdos de alli son hermosos.
Pasamos unos veraneos de 1ª, y tambien se la dimos a nuestros hijos.
Gallego Gustavo.
Enseñen a los niños a ser preguntones, para que pidiendo el por qué de lo que se les mande hacer, se acostumbren a obedecer a la razón y no a la autoridad como los limitados, ni a la costumbre como los estúpidos.
Enseñen a los niños a ser preguntones, para que pidiendo el por qué de lo que se les mande hacer, se acostumbren a obedecer a la razón y no a la autoridad como los limitados, ni a la costumbre como los estúpidos.