La idea original era visitar el Mister Big antes de que lo rescataran, así que aprovechamos un día medio ventoso y nos fuimos desde Reta hasta Claromecó por playa. Mis viejos venían en la Ranger y mi hermana y yo en el Jimny. Luego de comprar algo de comida para el almuerzo en Claromecó nos fuimos para el naufragio, no sabíamos si lo íbamos a encontrar o no, ya que días antes habíamos leído en un diario de Claromecó que las maniobras de rescate estaban planeadas para el fin de semana anterior, por lo cual desconocíamos si el barco seguía o no en la playa. Igualmente partimos con rumbo hacia Orense por la playa.
Unos cuantos kilómetros después se empieza a divisar a lo lejos el Mister Big.


Al llegar al lugar nos encontramos con un grupo de operarios que estaban trabajando en el barco. Paramos a sacar algunas fotos y ver el navío más de cerca.






Luego decidimos seguir hasta Orense que no estaba lejos, y como ya estábamos en el baile decidimos seguir hasta el Pagrus I (siempre y cuando el arroyo Cristiano Muerto no estuviera muy crecido). Dado que el arroyo no dio problema alguno, lo cruzamos y seguimos nuestro camino, pero antes se me ocurrió ir a investigar uno de los enormes médanos que hay por esa zona:



Luego paramos a comer en el Pagrus I y sacamos las fotos clásicas.




Lo que me dio un poco de lastima es la cantidad de grafitis que le hicieron al barco en tan poco tiempo, hace unos años lo había visitado y no estaba tan escrito.
Luego de manejar la idea de seguir un poco más adelante y llegar hasta el Médano Blanco, decidimos pegar la vuelta ya que habíamos quedado en encontrarnos con unos amigos a la tardecita y todavía teníamos un largo viaje de regreso.
Como estaba subiendo la marea pudimos observar un gran cambio en el nivel de agua que rodeaba al Mister Big.


Después de eso llegamos de vuelta a Reta sin ningún problema.
Espero no haberlos aburrido con el relato o las fotos, si bien no es una travesía para nada difícil a nosotros nos resultó bastante entretenida.