Consejos e indicaciones generales para conducir con doble tracción en los distintos terrenos que podemos encontrar.
La Postura de Conducción
Contar con una buena visibilidad es un importante aliado a la hora de practicar el todoterreno. Por lo tanto es recomendable mantener una postura lo más horizontal y elevada posible. La distancia ideal al volante se obtiene estirando los brazos, colocar el brazo por sobre el volante apoyando la muñeca debiendo quedar éste a la altura de las muñecas.
Los dedos han de situarse sobre y por debajo del aro del volante, sin llegar nunca a rodearlo por completo con los dedos, ya que si lo hiciéramos el volante podría girar bruscamente al chocar con una piedra y podríamos sufrir una lesión. El cinturón también es un elemento indispensable y hay que llevarlo puesto en todo momento (no solo por accidentes), si no por la sujeción en saltos, inclinaciones laterales y sobre todo en fuertes bajadas.
Antes de partir
Hay que tener ciertas precauciones antes de encarar un viaje de cualquier tipo. El vehículo deberá estar medianamente preparado, con un chequeo de los sistemas de refrigeración y ventilación del motor, los frenos, la suspensión, el sistema eléctrico y la dirección Todo pasa por realizar las tareas de mantenimiento habituales. El peso es una cuestión importante en un todo terreno y se debe procurar que el peso transportado, incluyendo a los pasajeros, no exceda del 75% de la carga útil del coche, pues las transmisiones y la suspensión son las primeras en pagar las consecuencias.
Durante el viaje es recomendable verificar diariamente los niveles del aceite y de los distintos líquidos (frenos, dirección, refrigeración, etc.), así como hacer una inspección ocular del circuito de frenos y el cárter, en busca de posibles pérdidas.
Los neumáticos son también un factor muy importante: Hay neumáticos de todo tipo y para todos los terrenos. Controlar los dibujos, posibles pinchaduras o roturas, el auxilio y la presión.
Manejar en barro
Conducir coches 4x4 sobre el barro requiere prestar mucha atención, no solo por que se manifiestan condiciones de adherencia muy bajas, sino porque, el barro puede encerrar trampas que a simple vista no se aprecian.
El poder abordar estos obstáculos sin problemas depende en gran medida del modo de conducir y de las llantas/cubiertas que use. Las cubiertas mas adaptadas para el Barro son las denominadas MUD (barro en ingles) se comportan bien en el barro si son bien manejadas, sin embargo éstas no se desempeñan bien en el pavimento.
Para conducir su 4x4 sobre barro debe tener en cuenta estos consejos:
1) Tenga presente donde quedan los diferenciales, hasta que se acostumbre no es mala idea marcar en el capó la ubicación de los mismos de modo que ante una deformación del camino no empieza a arar la tierra con el diferencial. La altura libre al suelo es vital para evitar avanzar “empujando” el barro con los ejes y la medida de las llantas que se use es la única manera de controlar ese despeje.
2) En el caso que circule en caravana aumente la distancia de seguridad entre vehículos.
3) Antes de cruzar un barrial haga una exploración del terreno. Use un palo para medir la profundidad y la existencia de obstáculos. Si no ve huellas de neumáticos que salgan del otro lado piénselo dos veces antes de abordarlo.
4) Es recomendable el uso de la reductora. En el barro se requiere una gran sensibilidad para controlar la tracción de las cubiertas durante las aceleraciones y el inevitable patinaje durante las frenadas. Algo que hay que tener claro es que no debe pelear contra el barro sino más bien intentar siempre FLUIR dentro del terreno a favor de las huellas y la gravedad.
5) Es recomendable circular por las huellas si estas van en la dirección correcta. Mantenga siempre el impulso hacia adelante, intente no pararse.
6)Si el ancho de la trocha no es suficiente ó el lomo central de la huella es muy alto debe conducir el 4x4 de manera que solo un lado caiga en la huella, manteniendo el otro encima del lomo, esto es suficiente para poder tener tracción y altura necesaria para atravesar una zona complicada.
7) SIEMPRE use la inercia del 4x4 acelerando de modo que se reduzca la pérdida de tracción sin olvidar que frenar bruscamente es difícil sin bloquear las ruedas y la consiguiente pérdida de control, use la caja para disminuir la velocidad.
8) En lodos profundos acelerar lo suficiente es una manera de liberar el lodo que se adhiere a las ruedas y adquirir suficiente inercia hacia adelante. Manejar dando aceleradas buscando tracción y a la vez limpiando la cubierta de barro es la forma correcta de andar “al ataque” en el barro y quizás la única forma de lograr conducir el 4x4 sobre el barro en la dirección deseada. A no ser que este avanzando no deje que las ruedas patinen pues simplemente se atascaran a una profundidad mayor.
9) Es una buena opción girar las ruedas de izquierda a derecha rápidamente, a menudo cuando se siente perdida de tracción la mejoran.
10) Puede bajar la presión de los neumáticos hasta un 50% (si no hay piedras), facilita que las ruedas expulsen el barro con mayor eficacia y de esta forma obtener mayor tracción. Las cadenas para nieve suelen dar un buen resultado en algunas ocasiones.
11) Si se queda atascado, intente retroceder y vuelva a avanzar hacia delante. Haga un hueco debajo de las ruedas y ponga piedras ramas u otro material firme para lograr más adherencia. Recuerde circular evitando en todo momento las aceleraciones y las frenadas bruscas. Si el vehículo se va frenando, es útil la marcha atrás, y salir por el camino ya hecho.
Si el vehículo se atasca definitivamente, no intentar nunca sacarlo acelerando, ya que lo único que conseguiremos será hundirlo más. Cuidado, este tipo de terrenos siempre viene con regalito: Zanjas, vadeos, huellones, piedras... Lo mejor es circular por las huellas siempre y cuando no sean tan profundas que nos podamos quedar “empanzados", si fuera a ocurrir esto existen 2 opciones, la primera es intentar parar y salir marcha atrás, y la segunda es acelerar más para poder resbalar sobre el trozo más profundo con los bajos, la elección de la opción es directamente proporcional al amor que sientas por tu coche.
Si hay dudas para cruzar, la única posibilidad realista es buscar otra alternativa de cruce. Importante tener unas planchas y una pala a mano.
Manejar en la arena
El amanecer, a la mañana temprano, o antes de que el sol se ponga, es la mejor hora para enfrentar la arena: La humedad de la noche no está evaporada todavía, dándole más consistencia a los suelos. La dificultad de la arena depende en parte del clima: A medida que el sol calienta el suelo, la humedad desaparece, y la arena se vuelve blanda y traicionera. Si la arena está muy blanda, es necesario bajar la presión de los neumáticos, y evitar las huellas de vehículos anteriores.
Las revoluciones del motor deben mantenerse altas, evitando en todo momento las aceleraciones bruscas y los giros cerrados. Los tramos blandos y largos deben encarase con una velocidad alta, y si aun así la arena nos frena, hacemos rápidamente un cambio inferior. El manejo debe ser decidido, sin vacilaciones. El freno también es bastante traicionero, usarlo pero con cuidado. Presión de Inflado: depende de la ocasión y el vehículo lo recomendado son entre 15-18Lbs, pero he usado hasta 10libras (ojo mucho cuidado al destalonamiento).
Al quedarse atascado, no se deberá intentar salir acelerando, ya que el vehículo se hunde más y más. Lo mejor es para la marcha, e intentar marcha atrás y luego, hacia adelante por otro lugar. Si esto tampoco funciona, un aliado mágico serán las planchas, que se introducen bajo la rueda. ¿No hay planchas? Cartones, una lona doblada, ramas, piedras... cualquier cosa es buena para hacer "piso" para los neumáticos. La pala puede sacar un poco de arena del medio, cuando no las manos de los ocupantes. También la pala es útil cuando se queda "colgado" del medio del vehículo.
Si la marcha es acompañada por otro vehículo (una regla del buceo aplicable a los TT: Nunca maneje solo), es conveniente que cruce una zona peligrosa de a uno por vez, y esperar que el primero haya cruzado antes de largarse.
Es importante enjuagar el bajo del motor cuando se termina el andar en la arena, y cuando se vuelve a la ciudad, o periódicamente, hacer lavar bien el motor: La sal que suele haber en las playas, es peligrosa para toda la mecánica de nuestro todo terreno. Evitar siempre el contacto con el agua salada, y revisar los horarios de las mareas. Cuidado con la temperatura del motor. Herramientas recomendadas: pala, cuarta de remolque o eslinga, planchas.
Las zonas de arena hay que abordarlas con decisión y sobre todo con una velocidad constante. Lo mejor es meter una velocidad lo más larga posible pero sin ahogar el motor, es decir que el coche vaya rápido pero sin hacer agujeros en la arena. Si metemos una marcha corta, las ruedas girarán muy rápido y se hundirán dejando el coche apoyado por la panza.
En caso de quedarnos atascados no deberemos seguir acelerando, ya que si lo hacemos hundiremos más el coche, nos bajaremos he intentaremos usar algún método de desatasco, como planchas, malacate, eslinga, etc… Si hay varias zonas con diferente tipo de arena intentaremos circular sobre la que este mojada o a la sombra ya que su densidad es mayor y será más difícil que nos quedemos atascados.
Si nos encontramos con dunas grandes no hay que olvidarse de mirar lo que hay detrás de ellas, porque podemos encontrarnos desde un gran terraplén a una enorme roca, y al ir con inercia para pasar la duna podemos tener algún "problemita".
Cruzando vados
Antes de vadear, es obligación una inspección previa del cauce, para determinar la profundidad, y los obstáculos sumergidos. Al atravesar un lecho con corriente, el suelo suele ser firme, pero si se trata de agua estancada, el fondo tiende generalmente a ser blando e inconsistente. Atravesar un río o un gran charco es una de las maniobras más espectaculares que se pueden realizar con un 4x4, pero hay que tener en cuenta varios factores para no llevarnos un disgusto.
Lo primero que debemos tener en cuenta es la profundidad del vadeo, con más de 60 o 70 cm. es mejor no intentarlo, a no ser que tengamos toma de aire elevada, ya que podría entrar agua por la toma de aire, que normalmente se encuentra en la rueda delantera izquierda en la parte de arriba del interior del paso de rueda. Si nos entrará agua en el motor este dejaría de funcionar y produciríamos una grave avería.
Lo segundo que debemos observar es el lecho del río, si es de barro , piedras, arena, etc... Para ello lo mejor es introducirse a pie en el río y comprobarlo, lo más complicado es cuando el fondo es fango, ya que hay un gran riesgo de quedarse atrapado en medio del río, cosa que no es muy agradable. Lo tercero es mirar si la salida del río tiene alguna complicación.
Una vez comprobados todos los puntos entraremos en el río con una velocidad constante, para que la ola que generamos no vuelva contra nosotros y suba por el capó con el consiguiente riesgo de entrada de agua, si el fondo es fangoso habrá que entrar con cierta inercia para poder salir.
Lo ideal es avanzar en primera con una velocidad constante, evitando hacer olas. Si tuvimos mucha actividad con el 4x4, es mejor dejar enfriar el motor antes de sumergirlo, en especial en los turbo diesel, ya que un choque térmico importante puede dañar el motor. También, luego de cada vadeo, es menester tocar repetidamente el freno, a fin de restablecer su eficacia, secándolo.
Cuidado que el agua no llegue al filtro del aire, ya que los daños son irreparables. Revisar el manual del vehículo para conocer la profundidad del vehículo. Sin embargo, estos parámetros pueden variar, ya que esta distancia es desde el piso hasta las puertas, antes de que empiece a entrar agua.
La mayoría de las veces, la capacidad real es mayor, como mínimo, los centímetros hasta la entrada de aire del motor. Una buena medida para aumentar la capacidad de afrontar un obstáculo acuático, es colocar una manguera en la toma del aire y sujetar el otro extremo al portaequipaje del vehículo. Si el vadeo es muy largo se puede hacer lo mismo con el caño de escape.
Manejar sobre nieve.
El grado de adherencia de este terreno, es mínimo: Como patinar sobre hielo.
Igual de divertido, igual de peligroso. Se requiere una suavidad y una exactitud claras en
el manejo del todo terreno.
Bajo este manto tan particular, se ocultan los obstáculos de siempre: piedras, huellas, zanjas y barriales en su interior, volviéndolos invisibles por completo, con lo que debemos extremar precauciones.
¿Cómo estar tranquilos? Manejar siempre manteniendo las huellas anteriores, a un ritmo constante, sin aceleraciones o frenadas bruscas, una velocidad que permite una respuesta rápida al acelerar. Los giros cerrados tampoco son recomendables.
Las cadenas son un factor importante: No permiten que las ruedas se llenen de nieve, y va rompiendo el terreno a nuestro paso. Imprescindibles para subir cuestas, tratando de hacerlo en forma de eses. Esto mejor la tracción y la direccionalidad del vehículo. Igual que manejar sobre barro.
Al descender, mejor una línea recta, dando pequeños toques al volante y al acelerador para corregir los deslizamientos laterales. Ante la nieve virgen, es conveniente llevar una marcha larga, y bajas vueltas, metiendo un cambio atrás si nos percatamos que el vehículo patina o se empieza a detener, intentando luego con un poco más de fuerza.
Los distintos tipos de nieve, responden también de manera muy diferente al "ataque" de nuestro
todo terreno:
La nieve primavera (muy húmeda), tiende a apelmazarse dificultando nuestro avance.
La nieve en polvo el coche avanzara con mayor facilidad, aun cuando la capa de nieve supere con creces la altura libre del vehículo.
Otra precaución: suele acompañar a la nieve otro elemento peligroso, el hielo. Ante el hielo nuestro mejor aliado son también las cadenas, y la precaución. Llevar también lo habitual: Pala, cadenas, y neumáticos adecuados, si es posible.
Manejar en hielo
Frenar con el vehículo derecho y con el embrague. Mantenerse en las Huellas. Cambios de ALTA a baja velocidad.
Tratar de colocar las cadenas con las Cubiertas afuera y emprolijar con alambre o cortar los sobrantes. Además de la linga habitual llevar el malacate, y otra linga corta para resguardar los arboles, ya que los cable de los malacates abrazando los mismos son muy destructores.
Manejando en Ripio
Si se recorre un camino de ripio de llanura hay que tener especial cuidado en las curvas, sobre todo cuando se transita en 4x2, porque si el camino está muy flojo, el vehículo tiende a derrapar y el conductor puede perder el control. Por ello, cuando se percibe que el piso no está firme conviene circular en la opción 4x4 alta (High), lo que brinda mayor seguridad.
Otro aspecto a tener en cuenta, si se circula en caravana, es la distancia entre los vehículos, porque cualquier piedra suelta puede romper el parabrisas. En caso de transitar por la montaña, si la pendiente es muy pronunciada se debe poner la opción 4x4 baja (Low) y subir en segunda marcha, siempre con las ruedas derechas y sin acelerar en forma desmedida para que los neumáticos no patinen.
Al bajar, también es recomendable hacerlo en 4x4 baja (primera o segunda marcha) y utilizando el motor como freno, para no calentar los discos de freno de las ruedas. Para que esto funcione, no se debe apretar en ningún momento el freno ni el embrague.
Al final de un día disfrutando abordo de nuestro querido Todo Terreno, lo correcto es realizar una revisión detallada de los bajos carroceria y chasis, también el motor líquido refrigerante y aceites tanto de motor como de diferenciales y cajas, verificar el filtro de aire y de ser posible darle todo el cuidado que se merece ya que después de todo es un "Todo Terreno" no un vehículo indestructible.
